Río Aguanaz
El Río Aguanaz es un curso fluvial que desde su nacimiento, en la Fuente Aguanaz, hasta su afluencia en el Río Miera, del cual es tributario, recorre 11,7 kilómetros. Para ello debe atravesar el municipio de Entrambasaguas, internándose en el vecino Ribomontán al Monte sólo en su tramo final, siempre dentro de la Comunidad de Cantabria.
Atraviesa los núcleos de Entrambasaguas, capital del municipio, Hoznayo y Valverde de Pontones, al que se acerca justo antes de finalizar su recorrido. Su principal afluente es el Río Entrambasaguas (6,5 Km), que dada su longitud en comparación con el cauce principal merece una mención especial, así como el Arroyo Bocarrío - Rondillos (4,6 Km) y el Bocarrón (3,1 Km.).
El Aguanaz nace en la fuente del mismo nombre, muy cercana al barrio de Hornedo. Surge en una cueva desde las profundidades de la tierra, hacia el norte. En este punto se encuentra el Centro de Interpretación del Agua y Río Aguanaz , junto al emplazamiento en el que forma un estanque. Se puede ver aún la antigua maquinaria de bombeo con la que se impulsaba el agua para el suministro hacia los núcleos cercanos. Todo este área es una zona boscosa muy densa, que abandona rápidamente, aunque mantiene el cortejo del bosque de ribera, que dibujará su contorno fielmente a lo largo de todo su recorrido.
Apenas 500 metros aguas abajo se le une el Arroyo Entrambasaguas, que le añade 6,5 kilómetros más al cauce principal, siendo prácticamente una extensión del que nos ocupa. Viene el Entrambasaguas desde El Mazuco, en dirección oeste, pasando por Hornedo (250 hab). Cuando se unen, el Aguanaz adquiere la misma dirección hacia poniente, junto al Barrio de San Antonio. El Pico de San Gregorio (126 m) impide continuar directamente hacia el norte, por lo que lo rodea saliendo hacia el noroeste, donde se encuentra con el pueblo de Entrambasaguas (1.526 hab). La vega es amplia y llana, cubierta por un mosaico de prados y cultivos, que se aprovecha para trazar la carretera N-634, y ya más recientemente, la A-8, la Autovía del Cantábrico, que une todo el norte de España.
Sigue en la misma dirección, evitando los 247 metros del Pico de Vizmaya para llegar a Hoznayo (966 hab). A su salida nos encontramos con la Fuente del Francés. Se trata de una serie de manantiales, descubiertos, según la tradición, por un abate galo que huía de las convulsiones políticas de su país tras la revolución francesa. Al lavar sus ojos doloridos, pues padecía de la vista, se dio cuenta de las propiedades curativas del agua, por lo que decidió volver repetidas veces hasta completar su curación. Los vecinos, ante el éxito obtenido, comenzaron a tratar sus propias dolencias, popularizando el emplazamiento.
Alrededor en la década de 1870 se levantó un balneario, con el auge del turismo termal que las clases altas habían impuesto en el país. Sin embargo, para 1910, el edificio ya se encontraba en declive. Por ese entonces, sus aguas se comenzaron a embotellar, e incluso llegaron a ser vendidas en farmacias, con el nombre de “Agua de Hoyanzo”, logrando ser muy reconocidas. A finales del siglo XX, el conjunto entró en una decadencia que llevó a su abandono en los años 80, quedando hoy en día tan sólo las ruinas de las instalaciones.
El cauce rola hacia el norte nuevamente, para llegar serpenteando entre un terreno algo más quebrado hacia Villaverde de Pontones (373 hab), y trazando una cerrada “ese”, se encuentra definitivamente con el Río Miera, que, a través de la Ría de Cubas y la Ensenada de Barquerías, llega a la Bahía de Santander, donde vierte sus aguas al Mar Cantábrico
Prácticamente todo el recorrido del Río Aguanaz, así como el de Entrambasaguas forma parte del Lugar de Interés Comunitario Río Miera. Viven en estas aguas, y son parte de los argumentos que sustenta esta figura, salmones atlánticos, sábalos, y nutrias, cuya población se ha encontrado muy amenazada, pero que comienzan a repoblar lentamente sus márgenes.
