Nota aclaratoria: La eliminación de azudes en desuso es una obligación legal

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Nota aclaratoria: La eliminación de azudes en desuso es una obligación legal
18 de marzo de 2025- En relación con la opinión publicada hoy en la prensa asturiana titulada “Priorio, en la encrucijada”, se realiza la siguiente aclaración:
Los azudes son infraestructuras transversales al cauce que elevan el nivel de la lámina de agua de los ríos, remansando el agua y facilitando su captación para diferentes usos.
Estas infraestructuras alteran el normal funcionamiento del río, al modificar el paso natural del agua, los sedimentos, nutrientes y los seres vivos.
España tiene inventariadas más de 19 000 barreras transversales en los ríos de demarcaciones intercomunitarias, pero se estima que en realidad hay muchas más, decenas de miles de obstáculos -generalmente en desuso- que no figuran en inventarios ni registros oficiales. La mayor parte de ellas son saltos verticales de escasa altura, construidos para permitir la derivación o sobreelevación de aguas superficiales para distintos aprovechamientos humanos. La fragmentación y alteración de nuestros cauces por estas barreras artificiales y las presiones asociadas es una de las principales causas estructurales del deterioro de nuestros ríos.
Cuando estas barreras dejan de ser funcionales, su eliminación contribuye positivamente a la mejora estética de los paisajes fluviales y genera sustanciales beneficios para otras actividades económicas, como la recreativa. La demolición de barreras obsoletas -o la permeabilización cuando aún se encuentran en uso- es una de las actuaciones más comunes en los proyectos de restauración fluvial. Con ello se reconectan los caudales líquidos y sólidos y desfragmenta la continuidad fluvial. Uno de los principales objetivos de los proyectos de eliminación o permeabilización de barreras es hacer posible que los peces migratorios puedan volver a colonizar aquellos ríos que una vez quedaron fragmentados.
La Unión Europea es muy sensible a este tema, tanto es así que en su Estrategia Europea para la Biodiversidad para 2030 se fijó la restauración de 25 000 km de ríos en Europa.
La Estrategia Nacional de Restauración de Ríos 2023-2030, informada el 28 de febrero de 2023 por el Consejo de Ministros, aprobada por Resolución del Secretario de Estado de Medio Ambiente de fecha 19 de julio de 2023, tiene como fin el logro de los objetivos ambientales y de seguridad hídrica de nuestro país, siendo uno de sus principales objetivos restaurar y reconectar estructural y funcionalmente 3 000 km de ríos españoles antes del año 2030. Entre los indicadores de cumplimiento de la estrategia se incluye el número de barreras transversales eliminadas (azudes).
Además, la eliminación de azudes en desuso es una obligación legal, ya que la normativa española en materia de aguas, en concreto el artículo 126 bis del Reglamento del Dominio Público Hidráulico, Condiciones para garantizar la continuidad fluvial, establece la obligación de eliminar los azudes que ya no se utilizan, como es el caso del azud del río Gafo en Las Caldas.
La Confederación Hidrográfica, en cumplimiento del artículo 126 bis del Reglamento del Dominio Público Hidráulico:
- Promueve la eliminación de infraestructuras que, dentro del dominio público hidráulico, ya no cumplan función alguna ligada al aprovechamiento de las aguas (demolición total o parcial de azudes).
- Elimina azudes en desuso que han pasado a ser propiedad del Estado, siempre tras una correcta evaluación de los posibles impactos que se puedan generar, o, cuando no resulta posible, construye dispositivos de paso.
La función originaria de esta infraestructura era la derivación del agua del cauce y su aprovechamiento como fuerza motriz de un molino. La captación se encuentra sin actividad y sin título concesional alguno, por lo que se ha procedido a la demolición del azud en cumplimiento del artículo 126 bis del Reglamento del Dominio Público Hidráulico.
El azud se disponía como una barrera transversal a la corriente del cauce que elevaba la lámina de agua sin disponer de mecanismos de regulación. Una barrera construida en hormigón con una planta recta, perfil trapezoidal y unas dimensiones de 26 m de largo x 1.5 m de alto. Esta infraestructura no permitía, en la actualidad, la derivación de las aguas al encontrarse el canal del molino sin mantenimiento y completamente obstruido. El azud o banzado tampoco disponía de pasos para peces, siendo infranqueable para la ictiofauna.
Las infraestructuras abandonadas, especialmente aquellas que no reciben mantenimiento, pueden representar un riesgo para la seguridad. Esto se debe a que su deterioro puede llevar a colapsos estructurales, lo que podría provocar daños a las personas y propiedades cercanas.