El Río Cadagua es un curso fluvial, que desde su nacimiento bajo el Canto Muriel, en los Montes de La Peña, hasta su final, como afluente del Nervión, debe recorrer  61,7 Kilómetros. Para ello atraviesa, en la provincia de Burgos, el municipio de Valle de Mena, y en la provincia de Vizcaya los de Balsameda, Zalla, Güeñes y Alonsotegui, separando en su tramo final los de Barakaldo y Bilbao.

Atraviesa los núcleos burgaleses de Villasuso, Vallejo, Villasana de Mena, Cerezo y Nava de Mena, y ya en tierras vizcaínas, los de Balmaseda, Mimetiz, Aranguren, Güeñes, Sodupe, La Quadra, Zaramillo, Alonsotegui, antes de unirse al Nervión entre Bilbao y Baracaldo.

Sus principales afluentes son el Río Ordunte (18,4 Km), el Río de Herrerías (10,9 Km), resultado de la unión del Río Artziniega (10,4 Km) y el Ibalzibar (8,8 Km).

El Cadagua nace en los límites de una estructura geológica espectacular. Las calizas, dolomías y arcillas cretácicas, formadas hace más de 90 millones de años, se vieron empujadas posteriormente desde abajo por la intrusión de un diapiro salino, rocas muchos más antiguas (más de 200 millones de años) que por procesos químicos ascienden hacia la superficie. Esta intrusión, de forma cilíndrica, rompe y levanta los estratos que se encuentran por encima, dejando a su alrededor una línea de fuerte pendiente hacia el interior, mientras que la ladera exterior es algo más tendida.

En esa parte interior, donde contactan las calizas con la estructura emergente, las aguas que se filtran entre las rocas carbonatadas afloran a la superficie, siendo el germen de este río.

Este punto se encuentra bajo el Canto Muriel y el Puerto de La Magdalena, en la parte inferior del cantil, muy cerca del pequeño pueblo de Cadagua (24 hab), que extiende su topónimo al resto del cauce. Sobre estos materiales salinos, que dejan una topografía llana, el río corre serpenteando hacia el este, pasando pronto entre Lezana de Mena (109 hab) y Sopeñano (66 hab) para llegar a Villasuso (64 hab) y Vallejo (59 hab).

Tras esquivar el Monte del Altollano, restos de la corteza que cubría el diapiro, el cauce toma un rumbo hacia el noreste, pasando por el Molino de Barrieta hacia Villasana de Mena, que con sus 1.559 habitantes ejerce como capital del municipio.

Abandonando los materiales salinos, el Cadagua torna hacia el norte, hacia Entrambasaguas (169 hab) y Maltrana (16 hab), atravesando las calizas por un estrecho paso que los sedimentos del río han ido colmatando, formando una pequeña vega que se abre a la salida del angostamiento. Es el lugar de emplazamiento de Ungo (21 hab) y Nava de Mena (153 hab).

La elevación de la Cruz del Valle (389 m) empuja el rumbo hacia el este, separándolo del Río  y Embalse de Ordunte, al norte, hasta su unión en el pequeño pueblo de Vega de Nava (18 hab).

Este embalse y sus reservas de agua, tienen la peculiaridad de, a pesar de encontrarse en tierras burgalesas, ser gestionado por el Ayuntamiento de Bilbao, ya que sus aguas alimentan a esta población, que dista más de 20 kilómetros. Esta circunstancia se remonta al gobierno de Miguel Primo de Rivera, en los años 20 del siglo pasado, cuando el dictador cedió la concesión de las aguas a perpetuidad.

Poco más adelante el río cruza la frontera entre los municipios de Valle de Mena y Balmaseda, y por ende, entre Castilla y León y Euskadi. La topografía se vuelve más vertical, aunque el fondo del valle sigue dejando el espacio llano necesario para acoger poblaciones de un tamaño grande, como es el caso de Balmaseda (7.759 hab), capital del municipio homónimo y que ocupa la práctica totalidad de la superficie plana del término.

En el Término Municipal de Zalla predomina la dirección este, aunque las capas de areniscas obligan a las aguas a tomar curvas continuas para esquivarlas, llevándolas hacia Mimétiz (5.549 hab) y Aranguren (1.915 hab), donde el espacio se amplía considerablemente, al confluir varios cursos, como el Somokurtzio y el Retola, por mencionar los más caudalosos. Esta vega amplia se extiende por el municipio de Güeñes, bañando su capital (1.668 hab). Este tramo sigue virando hasta llegar brevemente a rumbo sureste para, tras un ángulo de noventa grados, volver al noreste hacia Sodupe (4.122 hab), Quadra (292 hab) y Zaramillo (440 hab).

El río entra en  el siguiente municipio trazando un pronunciado meandro, en una vega que se ha ido volviendo más estrecha hacia la capital municipal, Alonsotegui (1.685 hab), encarando tras ella el último tramo, que, directo hacia el norte, separa Bilbao de Baracaldo. Finalmente, llega a la Ría del Nervión, a seis kilómetros de su desembocadura en el Golfo de Vizcaya, donde las aguas se encuentran con el Mar Cantábrico.

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