El Río Caudal es un curso fluvial que desde su nacimiento en Sovilla, al confluir los ríos Lena y Aller, hasta desdeembocar en el Río Nalón, a la altura de Soto de Ribera, recorre 20,6 Kilómetros.

Atraviesa tres municipios, que son, aguas abajo, Mieres, Morcín y Ribera de Arriba, aunque su cuenca abarca también los concejos de Lena, Aller y Riosa, atravesando a su paso las localidades de Ujo, Figaredo, Mieres y Soto de Ribera.

Con una cuenca hidrográfica de 654,407 Km2 sus principales afluentes son los Ríos Lena (12,3 Km), Aller (38,5 Km), Turón (11,5 Km), San Juan (10,6 Km), Riosa (15,1 Km) y Morcín (7,6 Km).

Este río drena gran parte de los puertos centro orientales de la Cordillera Cantábrica hasta llegar a los Picos de Europa. Así, el Río Lena es la confluencia de otros dos ríos como el Huerna y el Pajares, puertos conocidos por ser la salida principal desde Asturias a la meseta y acoger el ferrocarril hacia Madrid y la Autopista del Huerna. Por su parte, el Río Aller recibe las aguas del Río San Isidro, otro de los más conocidos puertos de montaña asturianos.

Cuando estos ríos confluyen en las casas de Sovilla ya se trata de un curso fluvial importante, en una vega de 250 metros de anchura rodeada entre montes que se elevan rápidamente 300 metros por encima de la lámina de agua, ocupados por prados de diente y bosques. Estas escuetas zonas llanas son muy poco abundantes por lo que en ellas se asientan núcleos de población, que debido a la actividad minera, pues este curso fluvial corta rocas ricas en carbón de hulla, ha ido ampliándose hasta casi formar un continuo separado sólo por escombreras con los restos de los materiales que a lo largo de un siglo se han ido extrayendo de la tierra.

La primera población que nos encontramos es Ujo. Este topónimo, Ujo, derivaría por su parte del latín ostium, que significaría puerta, en este caso del valle del Caudal, ya que es el paso principal para entrar en la región. Su nombre denota la presencia romana, así como los hallazgos de restos de esta civilización, lápidas de legionarios romanos, que aparecieron entre el siglo XIX y principios del XX, y son conservadas en el Museo Arqueológico de Asturias y en la Iglesia de Santa Eulalia de Ujo, a su vez Monumento Histórico Artístico desde 1923.

Tras salir de esta localidad se unen las aguas del Río Turón por la margen derecha, lugar en la que se sitúa Figaredo y siguiendo un poco más aguas abajo, Mieres del Camín, con más de 24.000 habitantes.

El río, que seguía fielmente una dirección hacia el norte, vira hacia el noroeste y describe un gran meandro en Ablaña, donde se sitúa la Central Térmica de La Pereda, para aprovechar el carbón generando electricidad. Despúes, la corriente se introduce en una estrecha garganta entre los Pico Figares y Bustiellu. Cuando la abandona vuelve a virar hacia el norte pasando por Argame hasta llegar a Soto de Ribera, donde cede sus aguas al Nalón, el mayor río de Asturias, que desembocará en el Mar Cantábrico en Muros de Nalón.

Aquí se localiza la Central Térmica de Soto de Ribera, que se alimenta de carbón y gas natural y se refrigera con las aguas de estos ríos, siendo la central térmica que mayor potencia eléctrica genera en el principado.

Este río no está protegido por ninguna figura, aunque la cabecera del Aller se encuentra en el Lugar de Interés Comunitario (LIC) Aller-Lena, y las de Huerna y Pajares se encuentran dentro del Parque Natural de Las Ubiñas-La Mesa desde su declaración en 2006. En este parque se puede encontrar, entre sus hayedos y la vegetación de alta montaña, aves rapaces, urogallos cantábricos y osos pardos.

El nombre del Río Caudal se remonta al adjetivo capitalem, entendido como el más importante o caudaloso. Por eso, en Mieres también es conocido como Río Grande.1 Por su parte, el Río Aller no tendría que ver con el latín que parece, el día de ayer, sino con la raíz hidronímica indoeuropea al- o alj-, que significaría blanco.

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